El proceso de atención médica en Colombia… de primera impresión lo que se nos viene a la mente no es algo tan chévere, sin embargo, está evolucionando rápidamente (menos mal). Cada vez más instituciones del sector salud están adoptando herramientas digitales para mejorar la eficiencia, reducir costos y ofrecer una mejor experiencia al paciente. En este camino de transformación, la firma electrónica aplicada a las historias clínicas es una de las innovaciones más importantes, pero también una de las que más dudas genera.
Una de las preguntas más frecuentes entre clínicas, hospitales y EPS es si realmente se puede firmar electrónicamente una historia clínica sin perder validez legal, la respuesta es sí, y no solo es legal, sino que además puede ser más segura y eficiente que la firma manuscrita.
En Colombia, la historia clínica es un documento legal y técnico, regulado principalmente por la Resolución 1995 de 1999 (establece las normas para el manejo de la historia clínica. Es uno de los marcos regulatorios más importantes en el sector salud, ya que define qué debe contener, cómo debe conservarse y quién puede acceder a la historia clínica). Además la norma establece que debe garantizarse la integridad, confidencialidad y disponibilidad de la información, así como la identificación de los profesionales que intervienen en la atención médica.
Ahora bien, ¿cómo se alinea esto con el uso de firma electrónica? Según la Ley 527 de 1999, la firma electrónica es plenamente válida siempre que pueda asociarse de forma confiable con su emisor y no hayan sido alterados después de su creación. Esto incluye, por supuesto, las historias clínicas digitales, siempre que estén firmadas bajo un proceso que permita identificar al profesional de la salud y proteger la integridad del contenido.
Además, el Decreto 2364 de 2012, que reglamenta el uso de la firma electrónica en Colombia, permite expresamente su aplicación en procesos administrativos, legales y contractuales, incluyendo aquellos del sector salud. En resumen: una historia clínica firmada electrónicamente con los controles adecuados es legal y válida.
¿Y cuáles son esos controles? Principalmente:
Implementar firma electrónica en la historia clínica no solo cumple con la ley, sino que además trae beneficios muy concretos: evita la pérdida de registros, acelera los procesos de atención, facilita las auditorías y mejora la seguridad del paciente al eliminar errores asociados con documentos ilegibles o manipulados.
Digitalizar las historias clínicas y firmarlas electrónicamente es el siguiente paso hacia una atención más ágil, moderna y responsable.
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